domingo, 12 de mayo de 2013

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La membrana brillante que fulgura y, debajo, la realidad sangrienta como una entraña.

 Birgitta Trotzig


la piel sobre la ropa destilando 
el baile de los otros siempre 

 de los otros, no mi cuerpo no 
mi desmayo mi sangre mis pasos no 

 el pliegue de la ternura 
hasta cuándo inofensivo 

 *

6 comentarios:

Anónimo dijo...

Esa rama de árbol florecido...Bellísima. L.

Dara dijo...

Yo también me lo pregunto.

Isabel dijo...

Me gusta mucho tu blog. Felicidades

Anónimo dijo...

Moonshiner! Vuelvo a estar on y empiezo a seguirte de nuevo, para que la otredad separada del cuerpo vuelva a ser inofensivamente menos distanciada. Besos libelulosos.

tournesols dijo...

libe, tenemos que vernos!

Hombre de arena dijo...

La ultima foto es como una estacion de metro.